Viajeros con cama

viernes, 29 de octubre de 2010

El poeta en la ciudad

El poeta en la ciudad
busca tu sombrero por los tejados,
busca tu tos en las bibliotecas.
Intenta encontrar tu silbido raro en los chinos, los locutorios. Las galerías clandestinas.
El poeta busca
tu mejilla en los socavones,
tus nalgas en las efigies.
El poeta muere. O finge que muere. Finge, menuda bobada, que se puede morir de ausencia.
Y busca, qué bobada, tu risa en los tanatorios.
Y tu aroma en las casadeputas francesas.
Y busca en ellas tu entrega, tu semen, tus babas en el borde de los martinis.
Y en los atascos, tu aliento.
Y se palpa la ciudad entera. Como un invidente. Y arranca el poeta los adoquines a partir del kilómetro cero.
Y en la noche
busca sin verla tu voz.
Y busca tus huellas en las comisarías. Y tu sombra. Y tus dedos
en los agujeros más oscuros.
Y busca tu rabia. Y tu silencio. Y (mira que es terco, el poeta), tus chillidos de juego de niño.
Y tu pene entre los electrodos
de la ciudad que enciende
orgasmos lentos.
(Y no encuentra. Y ya lo sabe, y no importa:
Para eso está, el poeta.)

2 comentarios:

  1. Hola Diana. Me dado un paseito entre tus versos y estrofas y oye, lo que he visto, ¡¡¡me ha gustado mucho!!!. Espero pasarme por aquí a menudo, como quien huye a un parque huyendo de no sabe qué. Un saludo y a seguir haciendo crecer este rinconcito literario...

    Posdata: Te has ganado un enlace en "Hamlet se toca pensado en ti"

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  2. un gustazo, gracias por pasarte. qué bueno encontrarse con otros constructores de refugios virtuales.. jeje.

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